Como cada año, mientras esperamos que los días D dejen de tener sentido, hoy conmemoramos del Día Internacional de la Mujer. Hemos navegado un poco por la red para sacar unas pinceladas sobre el origen de este día.
El Día Internacional de la mujer tiene sus raíces en el movimiento obrero de mediados del siglo XIX, cuando en un momento de gran expansión industrial las mujeres empezaron a levantar la voz. Por aquel entonces no tenían derecho a voto, ni a manejar sus cuentas, ni por supuesto a ningún tipo de formación. En 1848 las estadounidenses Elizabeth Cady Stanton y Lucretia Mott congregan a cientos de personas en la Primera Convención Nacional por los Derechos de las Mujeres, en Estados Unidos. Ambas mantuvieron que «todos los hombres y las mujeres son creados iguales» y exigieron derechos civiles, sociales, políticos y religiosos para el colectivo. Como es habitual recibieron burlas y menosprecios pero abrieron la primera puerta para que años después, ya en 1908, se celebrara en Nueva York una gran marcha en la que unas quince mil mujeres se reunieron para pedir menos horas de trabajo, mejores salarios y derecho a votar. Esta concentración se considera la antesala directa del día que hoy se conmemora. Dos años más tarde, en 1910, Clara Zetkin en la Conferencia Internacional de la Mujer Trabajadora celebrada en Copenhague sugirió la posibilidad de conmemorar un día internacional de la mujer a nivel global. Su propuesta fue escuchada y aprobada por un centenar de mujeres procedentes de 17 países aunque no se concretó fecha.
Parece que en sus inicios la conmemoración también sirvió de protesta contra la I Guerra Mundial; la ONU destaca la importancia de los acontecimientos vividos en Rusia, en medio de las protestas contra la Gran Guerra:«En el marco de los movimientos en pro de la paz que surgieron en vísperas de la Primera Guerra Mundial, las mujeres rusas celebraron su primer Día Internacional de la Mujer el último domingo de febrero de 1913. En el resto de Europa, las mujeres celebraron mítines en torno al 8 de marzo del año siguiente para protestar por la guerra o para solidarizarse con las demás mujeres», recuerda el organismo. En 1917, y como reacción a los millones de soldados rusos muertos, las mujeres de ese país vuelven a salir a las calles el último domingo febrero, bajo el lema «pan y paz». Esta movilización duró varios días y acabó forzando la salida del zar. El éxito de las mujeres rusas se consagró poco después: el gobierno provisional que se formó tras la retirada del zar les reconoció el derecho a voto. La fecha en la que comenzó esa huelga de las mujeres rusas en el calendario juliano, entonces el de referencia en Rusia, fue el domingo 23 de febrero. Ese mismo día en el calendario gregoriano fue el 8 de marzo, y esa es la fecha en que se celebra ahora. En 1945, se forman las Naciones Unidas para fomentar la cooperación internacional tras la devastación de la II Guerra Mundial y la carta de este organismo multilateral se convierte en el primer acuerdo internacional que consagra la igualdad de género. Tres décadas después, en 1975, la ONU establece y celebra por primera vez el Día Internacional de la Mujer el 8 de marzo, coincidiendo con el Año Internacional de la Mujer.
Nosotras, conscientes de lo mucho que queda por recorrer, celebramos lo conseguido y cogemos fuerzas como más nos gusta…No es lo que mejor hacemos, pero lo disfrutamos mucho. Y este año hemos tenido compañeros a los que recibimos con los brazos abiertos. Feliz domingo.